Destello de sutil señorío,
Conformación de elocuencia sustentada en una sola palabra.
Tu nombre.
Reseña de emoción, apocope de amor.
Furtivo el deseo de darle un beso,
Enloquecedora la realidad de abrazarla,
Inesperada la posición de mirarla,
Abrumadora la sensación de hablarle,
Un panegírico a la razón, que asume el descuido de las vanidades.
Carcelera de palabras que suplican darles libertad,
Libertad que se ganaron, pero el supuesto temor las pospone;
Gracia en todo momento, ágape a la razón,
Pusilánime inseguridad que posterga un naciente querer.
No errar es una convicción, que jamás se cumplirá,
Consumiendo la pena que me ronda, reclamo;
Deliro por remembrar el momento, la ocasión;
Que de unos labios recibieron calor, de una regular aberración.
Tenue mirada mirada, soltura en la palabra,
Recelo en el actuar, reproche en todo efectuar;
Único en el arte de una ilusión para armonizar,
Calma a mi mar, paz a mi guerra,
Pero aún más importante; amor en mis Días.
r-k 31/12/06.