Por las noches
cuando el insomnio
le roba tiempo a mis sueños,
la fragancia de tu cuerpo está presente.
Siento tu aroma
entrar en los pensamientos.
Con yesca encendida sacada de las entrañas
se ilumnina la mía tristeza,
alumbrando la lobreguez que tengo en el alma
al faltar tu amor.
Por la crédula alborada
te descubro en el espacio, soy tu dueño, y
dialogo con tu imagen.
A los Dioses pido que desciendas,
y con los sentidos precisarte.
Sólo que ante mis ojos
no te hallo.
bambam