DELICADA ABRIL

“ DESEOS FLORECIDOS “

  En  noches de  pasión e intenso  furor,

mis deseos  sucumben  desde el  interior,

de  ese continente  volcánico  sumergido,

teóricamente creí ese apetito extinguido;

hoy  pleno  de  pasión por  fin  despierta,

 abriendo  de  forma  dócil  sus  puertas

atravesando las  paredes de ese umbral,

   furioso  y  con la fuerza de un temporal,

intenta  andar  por esos relegados parajes,

trepándose  por esos  fecundos  ramajes.

 

 

  Siento como mi piel poco a poco  se eriza,

con  lo ardiente  y  suave  de  sus  caricias,

sus  ya ansiosos labios  comienzan a hacer

un  inusitado  y  muy   puntual  recorrer,

bosquejando  un   sendero   figurativo;

hacia  donde  está  ese mi  tesoro  furtivo,

siento  ya  lo  encendido   de  su  aliento,

quemando  cada  palmo  de  mi  cuerpo,

   y  solo imaginar  lo que pronto  sucederá,

hace entre grandes espasmos mis ojos cerrar.

 

  Me escucho llorar, entre  gemido y  gemido,

y el rápido cabalgar de mi corazón encendido,

lo hacen  enérgicamente de emoción  palpitar,

y de mis labios  hondos e intensos suspiros brotar,

  de improviso  mi  alma  cual   traviesa mariposa;

zigzaguea   y  en  su  ya  ardido  cuerpo  se posa,   

propagando  sus  ansias  de  un  modo silente,

viendo como  ya  en  sus  ojos  resplandecientes,

brilla la  flama  de  una   pura  e   infinita  pasión,

 la cual actúa  en ambos como eficaz combustión.

 

 

Y   en  medio  de  ya  apaciguados  besos,

cobijada entre  sus fuertes  brazos me recuesto,

 ambos extenuados  entre dormidos  y despiertos;

nos  miramos  a los  ojos decimos  al unísono,

¡ Que  bello  y  apasionado  es  lo  nuestro!