Sábado nocturno que dejas huellas
de extraños ecos en mi conciencia
desfilan lentos por mi memoria
dejando rastros en mi amargura.
Constante llegas tu ritmo: penas,
Te posesionas de mi aposento
de cada rincón extraes recuerdos,
tristes los dejas con mil lamentos
y el tiempo es largo inmensamente,
Mis ojos cierro para no verte
Tapo mis oídos por no escucharte
Cuando tocas las puertas y me sorprendes
Desnuda el alma y el cuerpo frío.
Entras callado te sientes dueño
De mis nostalgias y mi extravío.
Entras y en mi alma dejas vacíos