ALVARO J. MARQUEZ

TRISTEZA QUE NO SÉ

"Triste si alguien sin honor te humilla/ y algo con valor no vale,/ si el sol quiere brillar y no brilla/ y la luna salir y no sale".


Cada vez que escribo un poema triste,

quien me lee supone que en mí existe

una herida que nunca termina de sanar.

Yo suelo decir que es sólo inspiración,

que no existe en mi alma y mi corazón,

ningún mal que ya no se pueda curar.,

 

Lo cierto es que a veces ni yo lo sé,

si es un dolor que en mis adentros alojé

y allí se ha quedado echando raíces.

Escribo porque existo, porque existes,

aunque sean más los momentos tristes

que los momentos bellos y felices.

 

No sé si la tristeza un día me abordó

y si fue que la entrada se la di yo

por arriesgar el corazón a cada paso.

Ni sé si esa tristeza tenía tanto peso,

que no la podía disminuir un beso

ni el más sincero y amplio abrazo.

 

No sé si decidí algún día renunciar

a mi derecho tan legítimo de soñar

y dejar a los sueños desviar su camino

y en un ir y venir normal, muy humano,

fui con las semillas en la mano

sembrando de tristezas mi destino.

 

Tampoco sé si es que Dios lo dispuso

que un día me vio triste y supuso

que yo debía escribir bajo ese signo.

Porque es el alma que se purifica,

es mi mano que escribe y dedica

poemas a un sentir muy digno.

 

El hecho cierto es que así escribo,

puedo tener o no un real motivo

pero las letras hablan por sí solas.

Pues soy así y al fin y al cabo,

hasta el mar a veces está bravo

y vienen llorando sus olas.

 

Si se entristece el mar que es inmenso,

¿por qué no puedo yo ponerme intenso

y estar triste con razón o sin ella?

A lo largo del espacio estelar,

¿quién es el que le va a reclamar

por qué brilla menos a una estrella?

 

No sé si alguien algún daño me hizo,

tampoco sabe el mar por qué es indeciso

ni la estrella que un día se apaga...

Tal vez aunque les parezca raro,

cometí en mi vida un error muy caro

y ahora pues, muy caro se paga.

 

Al final terminé haciéndolo otra vez,

escribí con tristeza y ya ves,

siempre seré el mismo hombre

y el mar hallará oculto en la arena

y la estrella con la luna llena,

en algún lugar guardado tu nombre.