Puedo oir los gritos de la soledad el sonido del silencio las palabras de la frustracion que me dicen que ya los versos caen como gotas de rocio en los charcos de lodo, mi alma confia que el viento pueda llevarse los recuerdos que estan presentes aun en mi almohada que hacen que la tristeza y la agonia tomen vida en mi triste y desolado lecho donde la oscuridad abunda y llena mi alma de demonios que no pueden salir porque aun no he conocido la luz.
Se que la esperanza todavia no se ha apartado de mi, aun puedo sentir el aroma del amor que hace su mayor esfuerzo por sobrevivir en esta despreciable situacion, mas alla de mi lecho esta un arcoiris que por momentos alimenta mi fe, se que para llegar vivire una odisea interminable pero vivire para sentir la luz y el calor de un nuevo dia que acabara con toda esta desdichada agonia.
Al fin podre quitarme esa barrera de odio en la mirada, de seguir creyendo en los perjuicios de la vida, de aquellos inborrables espejismos y de toda esas lamentables mentiras que andan vestidas aparentemente como un gallardo hombre en un caballo blanco mas bello que el mismo pegaso pero nos engañan la mirada porque tras de el esta toda esa basura oculta.
Mi alma aun no esta vacia, todavia hay algo porque luchar, porque se que aun hay un aliento de optimismo en esta vida, porque la verdad solo podra llegar con ese aroma de amor, porque aun la fe vive en mi corazon; llegare a la luz aunque el interminable camino solo cause dolor.