Hay amor en mí por todas partes,
una masa de abrazos sin cadenas,
una manada de besos por mis venas
que empuja los latidos de mi sangre.
En mi pecho hay amor a toda vela,
en mis ojos, en los versos de mi arte
y no cejo en mi empeño que es amarte
cada instante de mi corta existencia.
Busco amor, sueño amor, vivo amor
y me enamoro sin dejar de enamórarme,
cada noche, cada aurora y cada tarde.
Vine al mundo por amor a dar amor
y cuando la muerte me llame a su lado
seré un cadáver para siempre enamorado.