Ya pronto he de irme.
¿Dónde? EL lo decidirá.
Nuestro Supremo Señor.
Mi final está cercano.
¿Qué final? No lo sé.
Es una predicción personal.
Un presentimiento.
Y quiero dejarte a ti,
a ti y a ti,
mi amor.
Tanto te he necesitado,
y tanto me has acompañado...
Cómo no he de agradecerte,
antes de mi partida.
¿Partir hacia dónde?
No lo sé. Pero he de partir.
A tu lado me he sentido feliz.
Te lo digo a ti , a ti y a ti.
Has estado con mis penas y alegrías.
Con mi dolor y con la dulzura
de mi corazón.
¿Corazón dulce? Buen corazón,
tal vez debería decirte.
Te lo digo a ti, a ti y a ti.
Gracias por acompañarme.
Gracias por ser tan solidari@.
Gracias por todos los momentos
compartidos.
Te lo digo a ti, a ti y a ti.
Quiero que me recuerdes.
Cuando ya no esté.
¿Cuándo no he de estar?
No lo sé. Tal vez falte
un tiempo. Tal vez
sea dentro de muy
corto tiempo.
Siento la necesidad
de decírtelo,
a ti, a ti y a ti.
No me olvides.
Te amo tanto.
Te necesito tanto.
Te lo digo a ti, a ti y a ti.
¿Te das cuenta qué es
lo que quiero decirte?
¿Te das cuenta de mi amor?
¿Por qué si te amo
no decírtelo?
Aprovecho ahora,
que vivo estoy.
Después, enmudecido,
no podré decírtelo.
Déjame hacerlo ahora.
Quiero que me recuerdes,
nada más.
Te lo digo a ti, a ti y a ti.
Rezo. Rezo siempre.
Siempre lo hice,
y lo haré, hasta el final
de mis días.
Te lo digo a ti, a ti y a ti.
¿Verdad que me comprendes?
Te amo a ti, a ti y a ti.
Hasta mañana.
Todos los derechos reservados del autor ( Hugo Emilio Ocanto - 07/10/2012)