Escúchame amiga mía
Dime por Dios que le has hecho,
A este pobre corazón, que desde
Que te conocí, solo piensa en el calor
De tus labios de tus besos, y tus pechos.
Dame un poquito de amor, aunque solo
Sea de amigos, pues las horas se me pasan,
Igual que un soplo de brisa, el rato, que,
por suerte, que estoy contigo.
Dame el fuego de tus besos, y de tu boca la miel,
Y un lazo que con tus brazos, pueda unirnos,
Piel con piel, Y así muy juntos los dos,
Podamos parar el tiempo, como se para a un reloj...
Autor Joaquín Méndez.
Reservados todos los derechos.
07/10/2012 8:42:49.