“Cuando no se tiene a quien se ama, sólo queda el camino de soñarle”
Ella es simple,
tranquila, sencilla;
por sus manos ruedan
cada uno de mis anhelos,
y en sus pies se pasean
todas mis desventuras.
Ella es transparente,
confiable, eterna;
en sus cabellos
enreda mis sueños,
y el viento acucioso,
los recata.
Ella es paciente,
amorosa, sincera;
bajo su piel oculta
mi locura de poseerla,
igual que mi derrota
al no tenerla.
Ella es bella,
incierta, inmaculada;
me entrega su mirada
mientras me roba las palabras,
y se escapa de mis brazos
para dejarme al amparo
del silencio.