Una simple flor
con su sutil y exquisita belleza radiante,
nos susurra al oído el amor y grandeza de la natura,
los primeros rayos del sol iluminando el amanecer
nos inunda de vida plena y armoniosa,
el mar con su inmensa fuerza
besando cada segundo las orillas de la vida,
el indomable desierto creando vida salvaje
para sobrevivir su dureza.
La mirada tierna de un niño agradecido
al ser amamantado por su madre,
suspiros de amor de enamorados primerizos,
un beso robado a hurtadillas en contra de todos,
la promesa eterna del amante infinito,
el que ser que da la vida por defender su hogar,
la caricia del viento sobre el rostro triste,
la sonrisa del anciano agradecido por la vida que ha vivido,
los lazos eternos de la familia,
la defensa de tus ideales,
los sueños de libertad,
el planeta que nos vio nacer y aun esta,
la poesía que se escribe llena de sentimientos,
la lluvia que hace renacer la vida.
Si el amor en cada palabra,
gesto, caricia, amanecer, ocaso,
susurro, natura, universo,
dejará de respirar,
en que nos convertiríamos,
el amor jamás tendrá que perdonar.
--------------------------------------------------------------Carlos Dos Santos Daniel© Todos los Derechos ReservadosVenezuela