En camino a más historias, para quien le guste
Baba Bishan Das solía contar una historia
para referirse a la influencia de las
compañías que frecuentamos.
Contaba él que había un nido en donde
anidaban dos loras, hasta que un día
ocurrió una gran tormenta
que las hizo separarse.
Una de ellas se encontró de pronto viviendo en
una aldea llena de ladrones y asaltantes
mientras la otra terminó por azar en el
ashram de un Sadhu que vivía cerca de allí.
La lora que terminó viviendo con los
ladrones y asaltantes no aprendió más que
las mañas y pensamientos de ladrones y
asaltantes. Mientras la otra lora aprendió
buenas cosas gracias a la compañía del Sadhu.
Una vez ocurrió que un rey salió de
cacería a la selva y se encontró con un
tigre. El rey sintió tanto miedo que salió
huyendo de aquella selva y llegó a la
aldea de los ladrones en busca de ayuda
y protección. Tan pronto la lora vio al
rey, comenzó a decir: "Aquí llega el rey
y tiene una corona con incrustaciones de
diamante. Denle muerte, atrápenlo, no lo dejen ir."
El rey podía entender el lenguaje de
las loras, luego de inmediato sacó su espada
y mató a la lora. Y al darse cuenta
que había llegado a un lugar poco recomendable,
pensó que era mejor huir de esa aldea.
Huyó de allí y cuando se fue aproximando
al ashram donde vivía el Sadhú,
al verlo la otra lora dijo: "Bienvenido,
amado, bienvenido; ésta es tu casa. Entra,
acomódate con tranquilidad y descansa."
Luego el rey estaba muy sorprendido
de ver que un minuto antes se
había encontrado con una lora que gritaba
a la gente que atraparan al rey y lo
mataran para apoderarse de toda su riqueza,
mientras que ahora veía una lora
tan suave y amable que le daba la bienvenida
al lugar y le decía, 'Estás en tu
casa, entra y descansa aquí.'
Entonces le preguntó a la lora: "Tú
eres idéntica a la otra lora, pero ¿por qué
la otra se volvió contra mí y quería que
me robaran mientras que tú eres tan amable
y generosa que me estás dando la
bienvenida a tu casa?"
Y enseguida la lora le contó la historia
al rey. Dijo: "Nosotras dos tuvimos
la misma madre. Y ambas vivíamos en
el mismo nido. Pero vino una tormenta
que nos separó. Ella terminó en la compañía
de ladrones y asaltantes, y por eso
aprendió malos hábitos y el lenguaje de
ladrones y asaltantes hasta volverse
como uno de ellos.
Yo, en cambio, fui
muy afortunada por haber encontrado la
compañía de este Sadhu y gracias a eso,
veo a todo el mundo como alma, como
hijo del mismo padre. Esa es la razón
por la que yo soy bondadosa y te estoy
dando la bienvenida a este lugar."
Por lo tanto, el significado de esta
historia es que uno se desarrolla según el
tipo de compañía que frecuente. Aunque
las dos loras habían nacido de la misma
madre, vivían en el mismo nido y comían
la misma clase de alimento, se volvieron
completamente diferentes debido
a la compañía que frecuentaban.