Nadie
Libro del desasosiego
Esta inquietud abrumadora
es sirena
que serena mi volición,
es canto
de llano desasosiego voraz
es amante
de la palabra jamás,
Me arroja, me obliga
a escupir la llave
y también a rechazar
la jaula de seis días,
Pues, alas,
en el lenguaje me cobijo,
única salvación y
primer origen sin fin
divino verbo. No
cobarde
O quizás prudente,
como el silencio.