Armando Sosa Bocanegra

Perfecto amor equivocado

Mi corazón todo te entregué,
ilusiones a mi vida le dedique
diciéndole que me querías
que la vida junto a mi compartirías;
 
Mi futuro todo lo hice tuyo,
entregándote mi mayor goce, mi mayor orgullo.
La luz mía te la entregué toda,
 
mi corazón contigo ha errado,
mis ojos, al verte me engañaron,
mi razón la perdí, solo por estar a tu lado,
perfecto amor equivocado.
 
Al conocerte una inmensa luz creí ver,
al besarte, una llama ante mí se empezó a extender,
tan solo con verte me seducías
creyendo que mía por siempre serías.
 
Mía y de nadie más
pues estar ante tí me llegó a cegar,
el advenimiento de tu ser sobre el mío
me causaba cada vez más aridez
ante tu sensatez.  
 
Aristocrática toda te creí,
sabia y agradable
con un amor siempre afable.
Ante ti digno no seria
de despertar ni un solo día.
 
Fuiste mi luminaria,
mi sensación más sagrada
y un perfecto error
que se encargó de causarme terror.
 
Juramos que era verdad aquella mentira,
pues solo decíamos lo que queríamos oír,
decir que mentíamos al creer aquella rara sensación
y evitar aquella inútil discusión.
 
Agua y aceite resultamos,
en medio de un tierno estrechar de manos.
De beso a mordida pasamos,
en nuestro inefable amor soberano.
Nos llenamos de aquella hipocresía
en la que se quedó nuestra simpatía
y nuestra alma se quedó vacía.
 
Ahora solo me engaño
al proclamar que te quiero,
al decir que te extraño
y el fuerte color del cielo
se niega a pensar  que aún te amo.
 
Vida mía no puedo continuar,
llorando te tendré que olvidar,
borraré lo que fue en vano
brindando con la copa en la mano
por este perfecto amor equivocado