Muy hondo en el corazón,
cada uno lleva la semilla
de un sueño secreto,
especial y sin par,
en cada individuo.
A veces, algún otro
puede compartir ese sueño
y ayudarlo a crecer hasta la plenitud ;
otras veces, el sueño sigue siendo
empresa solitaria, tan sólo conocida
por quien la asume.
Pero secreto o compartido,
no importa cómo sea,
un sueño es una fuerza potencial
que jamás debería olvidarse,
dejarse de lado.
Pues cada uno lleva, también en sí
una luz por la cual esa semilla,
puede alzarse y florecer en bella realidad,
Y esa es la luz , que he visto refulgir
tan claramente en ti....