Pasa el tiempo cuando pienso en ti,
y mi vida se detiene solo a contemplarte,
solo a ver esas imagenes que quedan en la memoria
cual quimica indisoluble,
como tinta que se aferra a dejar el papel mojado.
Luego, todo vuelve al momento
justo al instante en que ya no estás
en el que descubro mi fantasía y me sorprendo
inventando mundos
entre las infinitas posibilidades.
Entonces vuelvo a la realidad
Justo ahora cuando una idea
da forma a la tinta
que se aferra al frio papel.