Encontraste una rosa marchita en un desértico jardín
Y la transplantaste con fe,
La regaste con esperanza y lentamente volvió a la vida.
Encontraste a un lobo solitario en la oscura noche
Y le enseñaste que no todos son malvados, que no todo esta mal.
Que las personas buenas escasamente todavía existen
Y la prueba es que tú eres una de ellas.
Encontraste un ángel caído decepcionado de la arrogancia de su Dios
Y de la frialdad de su diablo
Y tú sanaste sus alas,
Le devolviste los sueños perdidos
Y le dijiste bienvenido.
Encontraste a una gris alma
Que no sabia cual era su lugar
Y la acogiste entre tus brazos.
Encontraste ese beso negado y olvidado
Y le diste refugio entre tus sagrados labios.
Ahora lo único que puedo hacer por vos
Es ofrecerte mi vida.
Te protegeré de todo mal,
Te regalaré estos trocitos de ilusiones
Que renaciste con tu mirada
Y buscaré como lograr
Que la eternidad forje este amor que siento por vos.