Besos que se anidan en el alma.
Besos que de tus labios hambre tienen.
Sediento el rocío de tus caricias,
a tu pecho abrazada con premura.
Sentir los latidos que te inspiran,
será siempre morir en tus ojos, ¡vida mía!.
Será mañana mi cantar como de pájaros,
que buscan el nido de tus brazos,
será vivir prendida de tus labios,
saboreando la miel de tus dulzores.
Temprano saldrá el sol celoso,
de mirarme en tus lindos ojos,
despertarán mañanas frías,
Y después moriremos en los brazos,
y nos atrapa el tiempo para amarnos.
-Dichosas las olas de los mares,
que en su ruido se abanican
al sentir los cuerpos que se aman-.
Las arenas nos acogen venturosas
de sentir los pies cruzando por el suelo,
dejándome prendida de tus besos,
para seguir soñando que te tengo
entre besos sedientos de caricias.
Volamos en las alas de los vientos
y envueltos despertamos entre sábanas,
quedando la huella de los besos que nos dimos,
sintiendo los latidos de la piel,
quedando unidos en los besos
…Besos sedientos de caricias…
-A mi siempre amor-
Alicia Pérez Hernández
(No es la pluma la que escirbe es el alma)