SIN COYUNDAS
Para vencer el frio y las tinieblas
El hombre al fuego hizo prisionero,
Y después en los templos y en maderos
Aprisionó a los dioses que en ti medran.
Era preciso hacerlo pues la gleba
Necesitaba siervos que por miedo
A no ascender tras de la muerte al cielo,
Sumisos aceptaran la cadena
Y dios tronó con voces tremebundas
Mandando se respete al gobernante,
Al dueño de la tierra y al tunante
Que hacen fortuna con el descendiente
Del esclavo, del siervo y de las gentes
Que hoy siguen siendo esclavos, sin coyundas.
fernandocardonakaro