Estoy dormido para soñarte, saber que respiramos juntos
hoy la llovizna ha esclarecido el cielo
sí, es un día lluvioso
lleno de expectativas -entonces he pensado en ir a verte-
saber si estas en el mismo sitio
con aquella falda, diminuta quizás
para mirar tus piernas, acariciarlas
y que mi mano suba lentamente a tu sexo
y que tu boca llene mi boca con un beso.
Levantarme hoy fue tan extraño
fue siniestro mirarme en el espejo,
en ese pequeño espejo de mi baño
diminuta silueta de mi rostro acongojado
casi sin vida
por pensar en ti…
tú has sido la hierba seca a mi paso
el vaso de mi vino que no acabo
-pero-
El deseo de verte me socava
es igual que esta mañana
donde la llovizna encharca las banquetas
mientras el frío penetra hasta el último rincón de mi cuerpo.
Definitivamente es sólo un hábito
ir en tu busca,
robar el tiempo de unos besos tibios
acariciar con brevedad tus senos,
invitarte una cerveza
para que estés conmigo;
sentir el libido momento de tus besos
y la caricia mustia
por eso voy a verte,
sin embargo siempre habrá algo de mí
que te sorprende
como la mollina que al clarear el alba
prendió mis pasos.