Anímate y se mía
en una noche o cualquier día
de madrugada aún despierto
te espera el corazón abierto.
Anímate, ven y se mía
no te excuses todavía
tengo un trago con dos vasos
y un cojín, “porsiacaso”
Anímate otra vez, y se mía
ya duerme la melancolía
¿que te cuesta ser felices,
mientras guardo versos tristes?