A tutti frutti
Sabor tienen tus ojos a avellana,
tus dos labios a cárdenas frambuesas,
sobre los pechos sabes a cerezas,
entre los tibios muslos a manzana.
Sabes como la miel de la Toscana,
todo con tu dulzura lo embelesas,
sabe tu cuerpo a chantillí con fresas
entre tiernas rodajas de banana.
Tus caricias me saben como a coco,
tu mirada a la pulpa de una piña,
tus besos al durazno y su frescor.
Ah, cuando te desnudas y te toco,
de nuevo lo confirmo, hermosa niña:
¡A tutti frutti sabe nuestro amor!