Aprenderé de tí cuando hayas vuelto
del lugar de donde nadie ha sido suelto.
Alegres tus ojos envuelvan el alba
tranquilos tus labios besen la calma.
Aprenderé de tí cuando hayas soñado
y siembren las aves el árbol cortado.
Halle el camino, encuentre la suerte
un alma triste cercana a la muerte.
Aprenderé de tí cuando me hayas amado
y el triste recuerdo sea solo pasado.
Extienda mi mano a tu figura cercana
y olvide el lugar que llaman mañana.