Jonathan Nicolasf

Vuelve a brotar

En el canto de las copas Seducidas por el viento,

En el gajo renaciente de los restos de la muerte.

Junto al espeso rocio, haullentado por el alba,

Vieja tu sabia mirada y se mezcla en el ocaso.

 

En los pastos aplastados del instinto de tu vida,

En la caida de las hojas conociendo sus raices,

En el grito de esperanza, tu presencia y tu calma

En la tierra bien sentida hay aroma de tu alma