Pondré mil candados a mi puerta,
remplazare los vidrios de mi ventana
por acero e intentare sellar mi corazón.
Se me desboca la pasión
y flaqueo en olvidarte
y desespero por besarte.
Lanzare objetos contra las paredes,
morderé mis uñas compulsivamente,
con el objetivo de desviar
de una forma u otra mi ansiedad
por verte.
Me duele no tenerte frente a mí,
con un beso podría sobrevivir
otro tiempo para seguir
muriendo por ti.
ya no quiero y luego si,
pensar en ti,
en esa boca que me enferma,
en tu mirada
que me induce a la locura carnal.
Aun sabiendo lo banal
que es amarte,
quiero desnudarme
para que me tomes infinitamente
y hagas lo que te plazca de mi.
Quiero ser tu objeto
y me conflictúo con la “dignidad”,
como si supiera lo que es eso.
Me refrendo los valores que he perdido,
mientras embarro mis ganas en la puerta,
soy capaz de derribarla
con tal de tenerte un día más
y luego morir en santa paz.