A mi amiga Stoicxcat, con cariño
Hoy me has dicho que tu vida perdió el espectro de colores.
Que el blanco y que el negro lo colman todo.
Te he dicho que pruebes las acuarelas gráciles de tus tiernos sentires,
para iluminar las sombras que a tu alma tratan con oprobio.
No te he dicho que así no haya sentido,
solo que no socorre asirnos a ese gris implacable.
El tiempo lamentable o afortunadamente acaba venciendo a la congoja
y termina convirtiéndolo todo en olvido.
¿Has paseado por mi lugar?
No he tenido la posibilidad de llenarlo aún de alegrías o tristezas,
ni de errores, ni de atinos, pero es mío y es lo que tengo,
es mi presente, es lo único dogmáticamente cierto.
El pasado son recuerdos tristes o contentos,
el futuro no sé, lo que si sé es que el “hoy” es mío y me pertenece,
y si le pongo colores voy a sonreír.
Y nunca más el gris debe ocupar tu mente,
pues no he visto un arcoíris blanco y negro
que haya producido el sol con lluvia alguna,
por mas ácida o etérea que esta sea.
Pero si he visto un colorido arcoíris
convertir un día gris en uno dichoso.
Entonces te invito a colorear el presente
y dejar blanca la idea.
El negro lo dejaremos en el pasado, en la noche obscura, en las sombras,
dejémosle que el tiempo se va a ocupar de hacerlo inadvertido.
Autor:
Tomás Enrique Maneiro Quesada
EL CABALLERO DE LA RIMA