Surcarán golondrinas creando un nuevo pacto
y nada será convertida en todo, en un cuento de hadas,
dos palomas dirán su verdad a la luz de la luna,
mientras encuentran tus ojos perdidos en la poesía.
Brotarán esperanzas por el agujero del tiempo,
y tendremos tiempo para darnos una esperanza,
tú retomarás la vihuela acompañando el coro de ángeles,
mientras yo me decido a recitar mi más reciente sonata.
Cada vez, será distinto desde este momento,
y habrá verdad en cada palabra aspirada por tu aliento,
de un beso vagabundo haremos una novela de primavera,
y no me cansaré de decirte que tú eres la primera.
Por lo que queda en el mar, haremos un trato con las olas,
y consideraremos como nuestra morada a la inmensidad,
de tus labios y los míos susurrarán palabras con color de alma
y sin pensarlo dos veces uniremos el universo en nuestra cama…
Ricardo Felipe
Un soñador sin mucha estirpe