Ella.
Aún veo tus fotografías que conservo en mi PC,
me llenaron de alegría aunque no toque tu piel.
En una está tu sonrisa cuando abrazas tu retoño
y muestras esa ternura que habita dentro tus ojos.
Mueves en mi el sentimiento que sin pensar despertaste;
que acaricio con anhelo aunque de mi te marchaste.
No me olvidaré de ti; los recuerdos que dejaste
despertaron mi sentir y a querer tu me enseñaste.
Me inspiras.
Vi limpieza en tu mirada
y el deseo de avanzar;
y te cruzaste en mi vida
que era un dolor sin igual.
Aprendí a querer tus cosas
y desplacé mis dolores
que en mi ignorancia creía
nada los aliviaría;
Pero ya ves; fue un proceso esta agonía;
hoy me siento más liviano;
y el encierro en que vivía
no me daña como un día;
que alucinando veía
que el dolor me acabaría;
mis fuerzas ya no querían
derrumbar atajaderos…
…Y entregarme sin pelear
al arcano misterioso
despreciando en un momento
la oportunidad de vida
que sexualmente hace tiempo
en un clímax verdadero,
me engendraron y yo pude
ver la luz y el sentimiento.