CARLOS ALBERTO BADARACCO

LUZ DE ETERNA ESPERANZA

 

 

La esperanza es un signo de vida,  está presente en el alma,

donde reside el amor.

 

La existencia perpetua aguarda un signo de franca alegría,

un mensaje de goce anidado

en cada trecho vivido.

 

Habremos de arrojar a un costado, eternos recados ocultos:

caricias, ternezas, abrazos, para prodigar en el mundo

la fe por un futuro mejor.

 

Habremos de dar gracias

y luego…

darle la mano al otro para contagiar alegría,

para entregar signos puros

que surjan de un verdadero amor.