PRIMAVERA EN MIS MONTAÑAS
Hoy siento en el alma mía
un tenue temblor de estrellas,
todas las rosas son lilas
como mi cuerpo desea.
Llegando la primavera
enamorada del viento,
decora con lentejuelas
cicatrices del invierno.
El alba está fascinada
madruga hilvanado cantos,
y acaricia diademada
nuestros nuevos lirios blancos.
Primavera en mis montañas
flor silvestre, mis encantos,
los gorjeos en cascadas
adormecen los quebrantos.
Flores rojas ha traído
a mi valle sanjuanino,
en mis manos llevo un lirio
que en su cuello he prendido.
¡Oh, primavera eres duende,
escondida en el refugio
tan invernal de otro vientre,
y al asomarte despacio
van cautivando tus mieles!