Un viejo álbum de fotos
me mostró mi abuela
y pude ver mi rostro
en tiempos de escuela.
Lucía muy distinto
vistiendo franela,
mis ojos eran los mismos
de color canela.
Mi pelo peinado
de especial manera
era encrespado
como el de mi abuela.
Gracias abuelita
dártelas yo debo,
estas fotos evitan
borrar los recuerdos.
Alejandro J. Díaz Valero