*** Versos de la Rosa ***
*Salmón*
Habéis visto los salmones saltando corriente arriba
realizando su escalada contra corriente asombrosa,
voluntad que no es comprensible por los científicos
cuando regresan noblemente al lugar donde nacen.
*Alevín*
Nacen en el río permaneciendo entre el agua dulce
mientras es criatura hasta que le llega la juventud,
bajando el océano donde esperan hasta la madurez
hasta el tiempo de reproducción iniciando la vuelta.
*Esguín*
Ese recorrer monstruoso con cientos de kilómetros,
con dificultad de los rápidos y cascadas insalvables,
tienen que liberarse de las plantas que les retienen
algunos gritando no subas más hay peces atacando.
*Murgón*
Los salmones tropiezan entre el agua a otros peces,
que dejándose arrastrar por la veloz corriente dicen,
ven con nosotros al océano porque allí se nada bien
qué quieres hacer allí arriba, acaso no serás salmón.
*Salmón*
Mirando el salmón ve peces heridos con mordeduras
cuando vacilante decide que se quedara a descansar,
un buen rato cuando le parece que el río lo remansa
para continuar cuando haya recuperado sus fuerzas.
*Esguín*
Pero al tiempo escucha una voz interior que le incita
continuando el éxodo con un salmón que brega duro,
seguir río arriba con la corriente empujándote abajo
no tienes elección esguín agua arriba o hacia tú mar.
*Murgón*
No comes desde que comenzaste la ascensión arriba
no todos ganan, muchos mueren exhausto de nadar,
en el sitio de nacimiento una hembra planta huevos
los machos los fertilizan agonizantes al agotamiento.
*Precio*
Nadar contra corriente en la vida humana es penoso
por el precio abonado por su magnánima fecundidad,
qué experiencia de su convivir avalan esa afirmación
atendiendo la voz interior que indica seguir adelante.
*Revés*
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
3 de noviembre de 2012