Un día hace tiempo me encontraba solo en el mundo y no tenía con quien compartir mi poesía, había mucho ruido en mí y cada parte de mi necesitaba calor para poder seguir siendo completamente feliz… pero un día llego una pequeña invitación de la cual no estaba seguro de aceptar, era algo informal y solo era para ir a verla cantar. El día llego y con dudas acudí al lugar, me di un tiempo para entrar porque a nadie conocía en aquel lugar. Al fin en un arranque de valor decidí entrar y en más de una ocasión te quise ver pasar, pero no sucedió; en el tiempo más crucial yo me decidía a retirar cuando tu nombre en el micrófono escuche mencionar, me quede por un momento para oírte cantar pero algo paso que no salió nada normal y en un momento de desesperación bajaste del lugar. Por alguna razón toque tu mano al verte pasar y con prisas y llantos me preocupaba tu mirar, fui hasta ti y platicando contigo tus lagrimas dejaron de caer y una pequeña sonrisa yo llegue a ver… no sabía que pasaba ni que iba hacer solo que me interesabas y que te quería volver a ver.