En aquél estudio solo existía ruido
el fascismo un gol había metido.
La libertad expiraba su ultimo aliento
también un poeta que por ella suspiraba,
aunque la sangre le sudaba por la cara
al morir por ella no mostró arrepentimiento
no hizó otra cosa que serla leal
solo ella daba sentido a su obra
obra tanto justa como luchadora
fiel a sus principios hasta el final.
Su voz era la de la clase obrera
murió pero vivirá por siempre
porque canto que ha sido valiente
siempre será canción nueva.