Te extraño
como se extraña al ser querido en el extranjero,
a la patria cuando lejos
y al ser amado en el cielo.
Te extraño
como el bebé a su madre,
el pájaro a su nido
y la liebre a su guarida.
Te extraño
como el río a su cause,
el mar a sus olas
y las cataratas a su agua.
Te extraño
como el piano a las manos,
la trompeta a la boca
y la guitarra a los dedos.
Te extraño
como los brazos al cuerpo,
los oidos a la voz
y la boca a los besos.
Te extraño
como el sediento al agua,
el preso la libertad
y el sordo la música.
Así es como te extraño.
Te amo más de lo que tu corazón
pueda comprender.
Vilma White