Cuando siento tu cuerpo muy cerquita mio
hierve mi sangre, tiembla mi cuerpo de amor,
como el galope de mil caballos va mi corazon,
con solo mirarte, se nublan sentidos y razon.
Te abrazo muy fuerte y busco tu boca,
esa boca tuya, que me vuelve loca,
y tus suaves caricias recorren mi cuerpo,
hacen que el mio se entregue ya muerto.
Juntitos y abrazados vamos a la alcoba,
la ropa por inercia ya se cae sola,
sentimos los cuerpos desnudos ardientes,
y damos rienda suelta a esta pasion candente.
Los cuerpos se remontan al espacio infinito,
amando como locos en esta gran pasion,
luego quedamos muy abrazaditos,
durmiendo siempre, corazon con corazon.
A la tibia mañana ya muy tempranito,
despertamos abrazados sintiendo en la piel,
las desnudeces de ambos bien apretaditos
y comenzamos nuevamente el ritual del querer.
MARIA HODUNOK