No sé si fue
tu transparente sonrisa
o el delicado roce
de tu poética mirada.
No sé si fue
el magnetismo de tu espíritu
o el cálido amor
que irradia tu corazón.
No sé qué le diste
a mi alma,
no sé que le hiciste
a mi mente,
pero igual que la claridad
diluye su intensidad
y se rinde de oscuridad
ante el inminente ocaso,
tu ternura difuminó
la voluntad de mi ser
y hoy mis pensamientos
se desgastan en ti.
e.g.