Le temo al olvido y a los que olvidan que el olvidar es perder lo vivido.
Al disonante governante que somete y empuja a los de abajo a rinconarsen en sus propias desgracias.
Al que se enriquece de la sangre de los pobres y del llanto de los nños.
Del juez que sin modestia alguna patenta su firma en contra del luchador social.
Le temo a la esclavitud que desonrra la dignidad humana.
Al implacable verdugo que madruga a la iglesia y pide que su espada no le falle.
A los que impiden soñar porque creen que el sueño es solo merito de reyes......
Pero hoy estoy construyendo la piramide de los posibles para no temerle a los imposibles.
Hoy mi pluma es mi pluma y mis sueños son el estandarte para alcanzar la libertad.