duele tanto escucharte decir amigo,
duele tanto escucharte hablar de otros,
duele abrazarte sin poder tocar tus labios,
pero duele mas la idea de no tenerte cerca.
como buenos amigos dormimos juntos,
tu en tu lado y yo en el mio,
tu soñando con cara de angel,
y yo despierto por culpa de cupido,
soportando las ganas de despertarte,
las ganas de darte un beso y decirte cuanto te amo...
pero no, por ese miedo eferrimo que me da cuando me dices amigo,
que palabra tan dura puede llegar a ser,
he llegado a odiarla,
intento dicimularlo con una sonrisa fingida y una beso en la mejilla,
no creo poder llegar mas lejos que a tu mejilla.
Cuando hablas de tu ex no me queda mas que sonreir,
cuando ries, rio con tigo, como todos los demas,
cuando te veo llorar, no me queda mas que consolarte, como nadie mas,
siempre estare alli para ti, ese es mi deseo y mi pena.
se que puedo parecer insistente con el tema,
solo escribo de ella,
pero la poesia se basa en lo que siento,
y es en esto en lo que pienso cada momento,
mi corazon se carcome, mis pulmenes se aprietan y mi respiracion se hace mas pausada,
intento matar esta idea en el humo de un cigarro,
o ahogarla en un vaso de amareto,
pero las cenizas del tabaco forman tu imagen,
y el color de amareto me recuerda tus ojos,
me he acostumbrado a esta pena,
no por gusto a sufrir,
si no por que me gusta estar cerca de ti.