Lo observo..
observo su rostro..
Su piel blanca casi transparente,
sus ojos..
Verdes, achinados.
Esa nariz..
Tan bien proporcionada y algo repingada.
Sus labios...
Rojizos, carnosos, seductores,
sus cejas...
Arqueadas, gruesas,
extremadamente expresivas,
tal como su mirada y sonrisas.
Sus razgos fuertes, pronunciados,
esconden detrás
un ser demasiado tierno,
un niño sensible y vulnerable
ante los tormentos del mundo externo,
esperando ser amado de una manera
que tan solo él sabe...
Bajo mi mirada y sigo observando,
y veo sus manos..
las veo rasgando mi cuello...
mi cuerpo...
Aaaa sus manos
son la perfección hecha carne..