Dejando en el camino
las nostalgias de mi vida,
-se estremecen las lágrimas-
que alguna vez se asomaron
a mi alma adormecida,
verbos sostenidos en cada uno
de mis sueños,
para poder gritarle al mundo
cuanto te quiero,
si la vida me pidiera razones
para quererte, tendría solo una,
simplemente tu.
--------------------------------------------------------------Carlos Dos Santos Daniel© Todos los Derechos ReservadosVenezuela