Se puede tener infinita paciencia para amar
pero cuando realmente se ama, es como ella.
¿Por qué? Lo único que me acerca su sentir,
el tiempo que una mujer ama y cómo lo hace,
siempre ha sido digno de alabarlo y de sufrir
porque toda mujer, aún la mas fuerte es dócil,
anhela ese reino, donde los brazos de Romeo
consientan sus cristales de llanto, sin partir.