Es el ave voladora más grande del mundo
tiene familiaridad con el buitre americano
con sus alas abiertas vuela cual aeroplano
come como el zamuro, pero no lo confundo.
Su plumaje de joven es de color pardo
de adulto, por lo general, negro azulado
luce un collar de plumón blanco como nardo
y las orlas en sus alas se lo han copiado.
Su cabeza está despojada de pluma
solo el macho en la frente viste una cresta
en sus ojos color marrón que no se esfuma,
en la hembra rojos, y no está indispuesta
Excursionista de la Cordillera Andina
desde Venezuela hasta Chile y Argentina,
su sentido más desarrollado es la vista
y ubica su manjar desde la altura andinista.
Puede resistir mucho tiempo sin comer
y cuando consigue alimento, se harta
dificultándole el sobrepeso al vuelo volver;
recobra agilidad porque vomitando descarta.
El cortejo para aparearse, agresivo y sumiso;
macho el dominante, la hembra en resignación
con el cuerpo inclinado da la señal de aviso;
el macho se monta sobre ella por un lateral
acercan sus cabezas de manera puntual;
ella lo picotea suave en señal de afición.
Al separarse, el macho silba y las plumas agita
a menudo la hembra con un silbido casi inaudible,
suaves picoteos en la cabeza y ninguno se quita
también en el cuello, de afecto indiscutible.
Macho y hembra se turnan para dar calor,
incubando el macho es más servicial
constantes en el desarrollo de la labor,
solo ponen un huevo en período bianual.
Con peligro de extinción
me crían en varios refugios
para darme protección;
sin aceptar subterfugios
menos que se hagan los sordos
me ayudarán en nuevo vuelo...
"El Cóndor"