Cuando los versos
dejan de ser versos,
y son plenos sentimientos
nacientes en las almas.
Cuando las palabras
dejan de ser palabras,
y son limpias emociones
en papel palpadas.
Cuando las letras
dejan de ser letras,
y son sensaciones
que la pluma;
del corazón arranca.
Cuando leés sobre el blanco papel
y sin saberlo ni quererlo;
se te eriza la piel.
cuando el rebelde lenguaje se rinde
al alma infinita, y empieza a serla fiel.
cuando el mezquino idioma consigue
transmitir el dulce aroma de la miel.
Cuando el alma clama
sus amores y desesperanzas,
cuando la sangre y el latir
del corazón, se funden y tornan
en estrofas hechas de llamas...
cuando la razón ya no entiende nada,
ahogada en un oceáno de palabras
y tan solo el corazón conoce;
los misterios más profundos del alma.
Cuando las palabras y los versos
se pierden en la eterna nada
y hay tan solo; reflejos del alma.
Como una rosa roja
brota en un campo de cenizas,
como una luz infinita
aplaca las sombras marchitas.
¡Así nace la poesía!