Sara (Bar literario)

La casa

Las puertas tenían claustrofobia

al pequeño agujero de una llave invasora,

 

Las ventanas, dos párpados miopes

por la luz y sombra de barbas ciclotímicas.

 

Las perillas tenían miedo de girar,

-Nunca sabían que había del otro lado-

 

La habitación era la única habitante

descansando tranquila.

Ella conocía el nombre,

 del silencio de las cosas.