No olvides que te ame con alma estremecida,
Encarnizando mí ser por tu felicidad,
Te colme de la pasión que tanto requerías,
Pero te has alejado y me has hecho mucho mal.
Ya no te acordaste mujer de lo que ha pasado,
Cuando la golondrina era nuestro hogar,
Cuando mi amada tu y yo tu fiel amado,
Felices en el seno de nuestra soledad.
Y simplemente te alejas cual tirana sin vida,
Dejando en mí pecho el más cruel vacío,
Marcando en mi corazón la mas grande herida,
Rompiendo en mil pedazos este corazón mío.
No se si volverás a mis fuertes brazos, mujer,
No se si mis ojos de nuevo te verán,
No se si en mi pecho nacerá un nuevo querer,
Que hará que de tus besos ya me pueda olvidar.
Pero si te alejaste, quizás hubo razón,
Quizá un nuevo amor toco tu alma impía,
Pero si fue así, entrega tu corazón,
Para que nunca jamás te lastimen vida mía.
No importa si yo quede en la más oscura celda,
Ya que la alegría es mi guía segura,
Porque te entregué lo mejor que yo tenia,
Y siempre te adore mujer con mi alma pura.
Por eso al Dios del cielo, pongo por testigo,
Que de mi amor por ti, solo hubo verdad,
Y que Él juzgue ahora todo lo que he perdido,
Para que con creces lo pueda yo recuperar.
Perdí mi corazón por tu boca sabor sublime,
Perdí mi alma por tu hermoso cuerpo santo,
Perdí la vida misma eso ha sido lo más terrible,
Por que la vida mía era quererte tanto.
Ya en estas horas eres vago recuerdo,
La sombra de tu nombre se esta desvaneciendo,
Por el corazón ama y aunque pase el tiempo,
Nunca un querer vale tanto para estar sufriendo.
Por eso ahora canto con milagroso deleite,
Sabiendo que amare con corazón sincero,
Y a una mujer le daré mi vida hasta la muerte,
Un amor que no se apagara que será como el fuego,
Solo eso a Dios ruego; solo eso…a Dios ruego