Te marchaste...
y mi alma se ahogo en quebranto,
no pude detener mi llanto,
mis ojos no alcanzaron a mirarte de lejos.
Te marchaste
y te convertiste solo en sueño,
tu alma se quedo en el aire
y hoy...cuanta falta me haces.
Te marchaste,
era tan grande mi congoja,
quisé seguir tras de tí,
pero tus pasos eran tan grandes
y llevabas tanta prisa,
que caí en cuenta que ibas llorando,
dime amor,despues de haberme amado,
¿crees que era necesaria la despedida?
Solo tú lo sabes,
cuanto alegrabas a mi corazón,
te aseguro cariño
que lloraré mucho este amor.
Te marchaste
y quisé beberme todo tu ser,
sé que sin tí
ya nada seré...
YOLANDA BARRY.