II Nehemias Cutire

¿En qué pensar cuando estás al frente?

En que eres hijo de Dios, que está siendo perfeccionado en Cristo,

que sigue avanzando a pesar de todos sus errores.

Pues todos tienen errores, iguales de depravados ante Dios,

pero mas ahora Justificados por Cristo, todos somos recibidos por gracia, nadie es superior a nadie.

 

La vida se construye, cada instante es un tiempo valioso para tal obra

y hasta el último momento de la vida seguiremos aprendiendo construir.

Hasta la muerte será única durante la vida de aprendizaje en la tierra

y si no fuera así, Todos serian como maquinas que no sienten nada y eso no es el plan de Dios.

 

Uno puede tener imperfecciones, pero al abrir los ojos, cada día al despertar

el seguir aprendiendo construir nuestra vida debe ser el objetivo.

Sé que algunas imperfecciones no se irán pronto pero eso no debe ser obstáculo,

para que seamos vencidos, sino deber es, seguir poniendo los pies firmes y dar marcha paso a paso todos los días.

 

El aprender debe ser como buscar una gota de agua en el desierto para calmar la sed,

como buscar la sombra de una palmera en pleno desierto para cubrirse de los rayos del sol,

como la búsqueda de una respuesta en medio del desierto donde solo transitan vientos con arena y la muerte acechando al debil.

Debe haber sed por el aprender, sed por la sabiduría, que se consigue cuando tienes desafíos que afrontar,

miedos que enfrentar, errores que no querrás repetir nunca más, por ello bienvenido al mundo de laberintos,

porque cada día deba ocurrir transformación, y no quedarse con la frase en la cabeza de, \"es que así soy\",

eso es entregarse a las garras del enemigo, solo él puede decir aquello y siempre lo será así porque no le queda otra.

Pero a los hijos del rey les toca la transformación transformación que se logra gracias al aprender.