Consuelo de recuerdos al olvido de un
viajero,
cargando momentos en mar de
almohadas;
vacías de amor herido fuerte contra
muros,
se ablandan por distancia cercana.
A ocho horas de diferencia con el sol,
En luna con aliento de soledad
acompañada,
mientras transcurre el tiempo regresivo,
los minutos se alejan del encuentro sin
ver.
El verdadero laberinto de armonías en
silencio,
acompaña el invierno cálido de cada
amanecer,
por los cuatro años vividos en ausencia.