Mamá, hábleme de su niñez
que siento gran curiosidad,
quiero sus años de niña conocer
por simple curiosidad.
¿Cómo era la difunta abuela
y el difunto abuelo también?
¿Dígame, sus caras como eran?
Que por fotos no los puedo ver
¿Cómo eran las escuelas
en esos tiempos de ayer,
si toda la gente era buena
o si habían malos también.?
Mamá, hábleme de su niñez
de corazón se lo pido;
que yo hablaré de usted
cuando me nazcan mis hijos.
Alejandro J. Díaz Valero